El entorno de gestión integrado de su empresa debe aportar las herramientas globales para controlar las diferentes áreas de su negocio de forma eficiente: Comercial, Financiera, Fabricación, Planificación o Seguridad.
Pero en el desarrollo de su actividad aparecen procesos específicos de su sector y emergen necesidades que requieren una respuesta ágil.
La capacidad para combinar las prestaciones generales y la funcionalidad sectorial supone una diferencia competitiva y una optimación implícita de su gestión.
Ejemplo: conversión de kilos provenientes del proveedor a metros en stock.